Muy cerca del faro de Buenavista, oculto entre acantilados y caminos poco transitados, se encuentra El Rayo, una formación geológica tan singular como enigmática. Su nombre evoca la leyenda popular que atribuye su origen al impacto de un rayo. Y aunque la ciencia nos ofrece una explicación distinta, el lugar conserva un aire de misterio que lo hace aún más fascinante.
Naturaleza y leyenda entrelazadas
Según la tradición oral, este gran hueco en la costa fue abierto por la furia de un rayo que cayó sobre la roca. Esta imagen poderosa ha perdurado en la memoria local, aunque los estudios científicos apuntan a un proceso geológico más complejo: un hundimiento sobre antiguas coladas sálicas, parcialmente recubiertas por pumitas procedentes de la erupción del cercano volcán de Montaña de Taco.
Un corte natural que revela la historia volcánica
Lo más sorprendente de El Rayo es que su formación ha dejado al descubierto una especie de ventana al interior de la tierra. Observando con atención, se pueden distinguir capas de coladas de lava separadas por escorias, como páginas de un libro geológico que narra millones de años de historia volcánica. Hacia el mar, aparecen también canales lávicos que probablemente actuaron como puntos débiles frente al constante embate del océano.
La fuerza del mar como escultora silenciosa
Todo indica que el origen de este hundimiento no fue instantáneo, sino progresivo. Las pleamares y los temporales costeros han ido aprovechando la estructura interna de las lavas para modelar lo que hoy vemos. En el fondo del hueco, los depósitos marinos confirman el papel protagonista del agua en este proceso lento pero imparable.
Un lugar para observar, aprender y respetar
El Rayo no es solo un paisaje curioso, es una lección abierta de geología. Visitarlo nos permite entender mejor cómo se ha formado el relieve de Buenavista del Norte y, al mismo tiempo, invita al respeto por estos espacios frágiles y únicos.
Si te acercas, hazlo con cuidado y respeto. El acceso se encuentra balizado por una cuerda para mejorar la seguridad en el disfrute de esta experiencia. La verdadera vivencia está en contemplarlo, imaginar su origen y dejar que el viento y las olas cuenten el resto.
¿Dónde se encuentra?
El Rayo se sitúa en las inmediaciones del faro de Buenavista, en la zona conocida como Punta de La Laja. Se puede acceder caminando desde el faro, siguiendo la costa y prestando atención al entorno natural.